Primeros pasos en el Sumo

¡Todo lo que necesitas saber para empezar en el sumo!

9/6/20238 min read

El sumo amateur

La Asociación Española de Sumo nace en 2023 y tiene como objetivo la difusión de la práctica del Sumo como disciplina deportiva en todos los rincones de nuestro país. Actualmente muy pocos gimnasios o dohyos ofrecen alternativas reales para practicar este deporte, es por ello que animamos a todas personas que estén interesadas en practicar este deporte a que lean esta breve entrada donde presentaremos los puntos fundamentales que deberán seguir para practicarlo.

Desde su sede en Tokio, Japón, la International Sumo Federation (IFS) ha promovido la internacionalización del sumo desde 1992. En la actualidad, cuenta con la participación activa de 87 federaciones nacionales de sumo, consolidando su estatus como un deporte genuinamente universal. En 2018, el sumo amateur inició los trámites para convertirse en disciplina Olímpica, y las negociaciones permanecen activas a día de hoy.

El sumo amateur, nace arraigado en los profundos valores del sumo profesional y mantiene intactas sus reglas fundamentales. Sin embargo, introduce modificaciones necesarias para convertirlo en una disciplina más global e inclusiva. El sumo amateur exige no solo una notable energía física, sino también una fuerza mental excepcional. Estos atributos se forjan a través de un entrenamiento constante que no solo nutre el cuerpo, sino también la mente.

Una de las principales diferencias con el sumo profesional es la incorporación de una categoría femenina así como la introducción de categorías de peso.

En las competiciones Masculinas tenemos las siguientes divisiones de peso:

  • Liviano -85 kg,

  • Mediano -100 kg,

  • Pesado Liviano -115 kg,

  • Pesado +115 kg,

  • Libre de Peso (Open-weight).

Por otro lado en competiciones Femeninas tenemos las siguientes divisiones de peso:

  • Liviano -65 kg,

  • Mediano -73 kg,

  • Pesado Liviano -80 kg,

  • Pesado +80 kg,

  • Libre de Peso (Open-weight).

El dohyo

Uno de los elementos más característicos del sumo es el terreno de combate, el dohyo. Tradicionalmente está hecho de arcilla y cuenta con un diámetro de quince shaku (4,55 metros). Delimitando el círculo se colocan una serie de fardos de paja de arroz (俵, tawara) y están parcialmente enterrados en la arcilla del dohyō. En cada uno de los puntos cardinales de la circunferencia se colocan un pequeño fragmento de tawara ligeramente fuera de la línea del círculo. En el centro hay dos líneas blancas, el shikiri-sen (仕切り線), detrás de las cuales los luchadores deben posicionarse al inicio del combate.

Pero claro, por lo general, quitando en algunas competiciones internacionales, o si entrenamos en alguna heya en Japón, el dohyo de tierra rara vez es usado en el sumo amateur. En nuestro caso, muchos gimnasios de sumo amateur emplean un dohyo de plástico portátil con, recordad, un diámetro de 455 cm. Este dohyo se colocaría sobre colchonetas de judo para brindar amortiguación en caso de caídas. Para delimitar el área de combate, se utilizan gomas verdes con cierre de velcro que se adhieren al plástico y funcionan como tawara, marcando claramente los límites del área de combate. De nuevo, es posible que no podamos disponer de estos dohyos portátiles, pero no os preocupéis, la alternativa es sencilla. Sobre el suelo de nuestro dohyo, preferiblemente blando como de goma eva, se puede trazar un círculo con tiza para crear un espacio de entrenamiento. También podremos utilizar toallas u otros objetos para ayudarnos a delimitar los límites del círculo.

https://www.youtube.com/watch?v=7s3yiI0odU4

El mawashi

El segundo elemento que diferencia al sumo de otras disciplinas marciales es el uso del mawashi. Este es una pieza fundamental en el mundo del sumo, una tira de tela que varía en longitud entre seis y ocho metros y presenta una amplia gama de colores. Su peso puede alcanzar hasta cuatro kilos.

La manera en que un luchador agarra el mawashi de su oponente, utilizando una o dos manos, a menudo juega un papel crucial en el resultado de la pelea. De hecho, el empleo de técnicas de sujeción del mawashi es uno de los pilares del entrenamiento en los clubes o escuelas de sumo. La otra técnica fundamental que se enseña en estas escuelas es el arte del tsuppari, que no involucra el agarre al mawashi sino que implica desestabilizar al oponente mediante empujones dirigidos hacia su rostro o cuerpo (más sobre esto en la siguiente sección).

Un agarre firme y eficiente del mawashi confiere una ventaja considerable en un combate de sumo. Permite al luchador levantar, empujar, lanzar o resistir los ataques del oponente de manera más efectiva.

'Pero es fundamental saber como ponérselo bien! Una regla antigua que rige en el sumo relacionada con la modestia: si un luchador llega a perder su mawashi durante el transcurso del combate, se considera automáticamente descalificado. Esta regla subraya la importancia y la dignidad asociada a esta prenda en el mundo del sumo. Aquí os dejamos un vídeo donde explica cómo ponerse el mawashi correctamente hecho por la Asociación de Sumo Estadounidense:

https://www.youtube.com/watch?v=xvF7wvkd-gI

Ejercicios fundamentales

  • Shiko: Esta es una de las técnicas distintivas y tradicionales en el deporte del sumo. Consiste en un movimiento en el que un luchador levanta su pierna muy alto, dobla la rodilla y luego la baja enérgicamente para golpear el suelo con la planta del pie en un gesto espectacular y característico. El shiko se realiza típicamente en una secuencia en la que un luchador levanta primero una pierna, luego la otra, en una especie de patrón alternado.

    El shiko se ejecuta durante las ceremonias rituales antes de un combate de sumo y también puede utilizarse como una forma de intimidación hacia el oponente. Además, se realiza como parte de las celebraciones y demostraciones en los torneos de sumo para entretener al público. Esta técnica no solo es una muestra de la fuerza y flexibilidad del luchador, sino que también tiene raíces en la tradición cultural japonesa y se considera un gesto de purificación y limpieza. Además, el sonido del pie golpeando el suelo en el shiko es un elemento importante en las ceremonias del sumo y se cree que aleja los malos espíritus. Desde un punto de vista deportivo estos levantamientos de piernas desarrollan todos los objetivos clave mencionados anteriormente, razón por la cual los luchadores de sumo practican cientos de shiko seguidos.

https://www.youtube.com/watch?v=YLvHesbDZUQ

Repeticiones recomendadas en un entrenamiento básico: 20 veces x 10 segundos cada una.

  • Koshi-wari: Es una variación de las sentadillas tradicionales que se realiza con una postura más amplia y los pies colocados hacia afuera en lugar de estar alineados con los hombros. Esta variante de la sentadilla se asemeja a la postura que adoptan los luchadores de sumo en el ring antes de comenzar un combate. Por lo tanto, a menudo se le llama "sentadilla sumo" en referencia a esta similitud. Es fundamental para el desarrollo de un tren inferior fuerte así como mejorar el equilibrio.

https://www.youtube.com/watch?v=f2HmCKGNz_4

Repeticiones recomendadas en un entrenamiento básico: 20 veces x 5 segundos cada una.

  • Suri-ashi: Es esencial para los luchadores de sumo al avanzar hacia su oponente o al realizar maniobras estratégicas en el ring. Al mantener un pie en constante contacto con el suelo y deslizar el otro, los luchadores pueden reaccionar rápidamente a los movimientos del oponente y evitar ser empujados fuera del área de combate. También les permite mantener una posición baja y estable, lo que es crucial en el sumo para resistir los ataques y mantener el equilibrio.

https://www.youtube.com/watch?v=Gp4Gmj-Lz8g

Repeticiones recomendadas en un entrenamiento básico: 20 veces x el diámetro del dohyo (4,5 m).

  • Mata-wari: Es una técnica que se centra en la flexibilidad y la capacidad de separar las piernas de manera amplia y rápida. Consiste en abrir las piernas desde una posición de pie hasta una posición sentada en el suelo, manteniendo las piernas estiradas y rectas en el proceso.

    El mata-wari es una parte esencial del entrenamiento de sumo porque ayuda a los luchadores a desarrollar la flexibilidad en las caderas y las piernas, lo que es crucial para maniobrar y mantener el equilibrio en el ring de sumo. Los luchadores deben ser capaces de separar las piernas rápidamente para evitar caídas o ser empujados fuera del área de combate. Además, esta técnica les permite realizar movimientos y técnicas de sumo con mayor eficacia. Es un ejercicio exigente que requiere práctica constante para mejorar la flexibilidad y evitar lesiones. Los luchadores de sumo suelen realizar esta técnica durante sus sesiones de entrenamiento como parte de su preparación física y técnica.

https://www.youtube.com/watch?v=mATc6rc1h64

Repeticiones recomendadas en un entrenamiento básico: 3 veces x 10 segundos cada una.

  • Chiri-chozu:  El ritual previo a cada combate. Una serie de movimientos básicos pero que requieren tanto de equilibrio como de gran fuerza en el tronco inferior. Se realiza tradicionalmente como forma de demostrar que los luchadores no portan ningún arma más allá de su propio cuerpo.

https://www.youtube.com/watch?v=QigxGYM8i_g

Repeticiones recomendadas en un entrenamiento básico: 5 veces x 8 segundos cada una.

Los combates

¡Es momento de combatir! Ahora que ya tenemos tanto indumentaria como los ejercicios básicos pasemos a las normas fundamentales de un combate de sumo.

Los combates enfrentan a dos luchadores, que se colocarán a cada uno de los lados del ring. Tras saludarse entrarán en el dohyo y realizarán el ritual del chiri-chozu. Una vez terminado se colocaran posición de tachi-ai cada uno de ellos tras las líneas blancas del centro del dohyo (el shikiri-sen). Cuando ambos luchadores apoyen los puños en el suelo cargarán el uno contra el otro. Las normas son sencillas: en el momento en el que uno de ellos toque el suelo con algo que no sea las plantas de los pies o sea sacado del ring habrá perdido. Las técnicas permitidas son agarres, empujones y golpes secos tanto al pecho como a los hombros. Patadas y golpes con el puño cerrado están terminantemente prohibidos, así como agarrar el pelo del oponente. Pequeñas patadas a los tobillos están permitidos como zancadillas.

Hay dos estilos fundamentales de combate que deberemos practicar. Muchos luchadores son grandes expertos en uno de ellos y es en el que basan su sumo, pero es importante tener solvencia en ambos estilos: el yotsu-sumo y el oshi-sumo.

El primero, el yotsu-sumo, consiste en un sumo basado en técnicas de agarre y lanzamientos. Es decir, buscaremos agarrar el mawashi del oponente para poder manipularle con más facilidad. Este sumo usa habitualmente técnicas basadas en el lanzamiento o proyección del oponente, lo cual será favorable si tenemos experiencia en otras artes marciales como el judo.

https://www.youtube.com/watch?v=ipb2HysmfX4

Por otro lado el oshi-sumo (también conocido como tsuki-oshi-sumo) se basa en rápidos y fuertes golpes y empujones contra nuestro oponente. Este es un estilo de combate preferido por los luchadores más grandes, que quieren evitar a toda costa que les agarren el mawashi y así, con su fuerza y tamaño, poder dirigir el combate. Es un estilo que requiere de una técnica muy pulida, y es el que permite a luchadores más pequeños desenvolverse y vencer a verdaderos gigantes.

https://www.youtube.com/watch?v=-k8VYESCBug

Dependiendo de como terminemos el combate la última técnica realizada es lo que se conoce como kimarite (técnicas de victoria). Así, el combate quedará registrado como victoria de X por Y. Siendo X el nombre del luchador e Y el kimarite utilizado. Actualmente hay 82 kimarites reconocidos por la Asociación de Sumo Japonesa. Aquí os dejamos un vídeo promocional muy chulo que muestra todos los kimarites reconocidos:

https://www.youtube.com/watch?v=w4ALqXvpPmg

Así que nada, ¡a practicar! ¡Hakkeyoi!